martes, 17 de junio de 2014

LO QUE MIS ALUMNOS HAN APRENDIDO... Y ME HAN ENSEÑADO

Este año me he sentido por primera vez en 21 años de profesión plenamente satisfecho como maestro:

- Mis alumnos han aprendido de verdad muchas cosas útiles para su vida:

Lo importante no ha sido que hayan aumentado su vocabulario en más de 2000 palabras, ni que sepan hablar con personas nativas, ni que hayan realizado un programa de Televisión, o que hayan dado la clase en inglés a sus compañeros pequeños, o que hayan hecho obras de teatro en inglés, o que hayan hecho el master chef en inglés, o que hayan participado en un fantástico Halloween, o que hayan adquirido un alto nivel de competencia lingüística comunicativa, o que lean genial, algunos han leído más de 100 cuentos en inglés, ni que sepan buscar información en inglés en internet,  o sepan hacer mind maps. No, eso no es lo más importante.

Lo importante, lo verdaderamente importante, de lo que yo estoy orgulloso y ellos agradecidos, es que han aprendido a llorar,  y estar orgulloso de ellos ( Un día me dijeron, "teacher hoy hemos llorado cuatro en nuestra clase y dos casi".  Y finalmente al despedir a Sarah Jones, una niña me dijo, "Teacher, hoy todos, hemos llorado todos") Han aprendido a ser sensibles, a mejorar como personas, a enmudecer ante el dolor ajeno, para luego reaccionar, a ayudar al que menos puede, a no reírse con el compañero, a respetar y respetarse, a pedir ayuda, a hablar de los seres queridos, aunque ya no estén con ellos, a abrazarse, a relajarse.

Para ello yo he llorado, les he contado mi sufrimiento y mi lucha, mis ilusiones.

Su respuesta inconmensurable: un niño al darle un regalo de fin de curso, me dijo, "Juan Carlos, el mejor regalo de este año ha sido tenerte como maestro", Gracias Arsenio, eso si es un regalo.

Otro regalo: al salir de clase de sexto, y despedirme con cuatro palabras bonitas, toda la clase estuvo aplaudiendo cinco minutos, ¡Alumnos aplaudiendo a un maestro! Gracias. Insisto, yo debería pagar por trabajar.

Finalmente al despedirme de mis alumnos de cinco años con un abrazo, un niño se ha puesto a llorar, diciendo, que le daba pena.

O Pichi mi alumno de 3 añitos, con su lengua de trapo me decía, "teacher, te quiero decir una cosa: El otro día en el teatro, una profe dijo: que te quería, y se puso a llorar"
¿Quién Pichi, Sarah Jones? no, no
Una profe alta.
( Sí, Pichi los maestros también se quieren, sobre todo cuando son de la calidad de Mónica)

Un niño de sexto al que "le he aprobado" la asignatura, a pesar de tener los exámenes suspenso, por su esfuerzo, dedicación e ilusión en todas las actividades, me ha llamado a parte y me ha dicho "Gracias teacher, por valorarme". Si no lo veo no lo creo estoy hablando de niños de 12 años.

Empiezo a creer que la escuela vale para algo; Empiezo a creer que este mundo tiene remedio. Con estos niños sí.

Este año sí, me he sentido buen maestro. Este año he enseñado vida, de la que no se aprende en los libros ni en internet, vida de la que no se olvida.
y este año he aprendido, a ser mejor maestro, Gracias chicos por enseñarme el camino


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